miércoles, 1 de mayo de 2013

Día y noche.

Me encanta la noche.
Noches oscuras. Sin luz, ni sombras.
Noches acompañadas, sin sueño.
Noches las cuales no quiero que terminen.
Besos, caricias, roces...
Instantes que duran y duran.
Y no terminan.
Y se quedan.
Y al día siguiente te vas.

Odio los días.
Días de luz. Con demasiadas sombras que te siguen.
Días a solas, con demasiado sueño.
Días los cuales quiero que desaparezcan.
Sin besos, ni caricias, ni roces...
Momentos que duran demasiado tiempo.
Y no se van.
Y aguantan.
Y me cansa estar sin ti.

Y en las noches, todo cambia.
Los gatos se vuelven pardos.
Las personas se transforman.
Tú y yo nos vemos.
Y dejamos de vernos bajo las sabanas.
Quiero que rompamos la cama
a base de una larga noche.
Quiero que tiremos la ropa al suelo,
decorando la habitación.
Dejarte marcas en la espalda.
Esperarte sin prisas.
Y al terminar, sonreír.
Mirarte a los ojos.
Darte un beso.
Y dormir.

¿Veis?
Por eso odio los días
y amo las noches.
Por que por el día me siento sola,
y por la noche, estoy con él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario